sábado, 28 de junio de 2008

DE TODOS LOS LUGARES FELICES DONDE HE ESTADO


"Para saber de amor, para aprenderle,haber estado solo es necesario..."
Jaime Gil de Biedma




En más de una ocasión

he intentado saber

que agujero vacio dentro de mí

trataba de llenar amándote;

que absurda cadencia,

como la de tus pasos alejándose,

habitaba estremeciendo mi pecho.



Así, cuando te fuiste,

habría sabido por mí mismo

por que lo hacías,

y no hubiera sido tan amargo

aceptar que el desamparo

también tiene ojos

de los que no se borrará nunca la última vez

en que se cruzaron nuestras miradas.



Supongo que de existir un Dios,

tal como nos lo enseñaron,

se habrá divertido contemplado

lo inútil de mi cacheo al pasado,



como el del que extiende a tientas una mano

palpando en la oscuridad

buscando dar con el interruptor

que le ofrezca alguna luz.



Recorriendo de un lado a otro los ángulos muertos

de mi muda memoria;

enterrando más allá

un rencor inútil

para el que quedaron preguntas por hacerte

que obligado por mi repentina ceguera

ha comprendido que nunca nadie me contradecirá.



Si no fue cierto nunca todo lo que sentimos

o forma parte de otra dimensión

que también habitamos

y donde nos continuamos amando.



Fue como si gritara a alguien que huye

llevándose mis líneas de la mano,

como el incendiario que me pide prestado

para comprar gasolina,

como un fantasma furioso

espectro de una venganza

que no está a su alcance,

como al final de todo

quedarse sin palabras.




Y sin embargo,

de todos los lugares felices

donde he estado

y querría regresar

estas tú.

No hay comentarios: