sábado, 28 de junio de 2008

AVIONES DE PAPEL


Mis torturadores han esperado

hacerme confesar un crimen que no he cometido.

Mis enemigos, desean que aguante

solo con el mal intencionado deseo

de ver como se alarga inútil mí martirio.

Mi hijo, me mira con esa mirada que tanto temo

mientras le insisto en que se esfuerce en sus deberes.

-¿Sabes hacer aviones de papel?-

me descompone con sus ojos expectantes

y su inesperado nuevo retador desafío.

Finalmente, abandonamos las sumas y restas

para acabar lo que queda de tarde haciendo volar mis cuartillas

con el texto en blanco de poemas descartados

exigiendo el rescate por algo que nunca he poseído.

Aun así, tengo fe en que la suerte

me llegue algún día como botín

de quien jamás se ha rendido.

Mientras tanto, hago volar magníficos aviones de papel

que describen imprevisibles órbitas

en su vuelo ingrávido

decorando el vacío alrededor de nuestras cabezas.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Gran poema, Óscar. La naturalidad de tus versos, como surgidos de una conversación, dan un todo de credibilidad que creo que es, sin duda, uno de sus principales activos. Verbo suelto, sin impostura, hacia la evocación de lo más hondo del sentimiento. Toda una poética, amigo.
Un cordial saludo.
Felipe

Anónimo dijo...

me gustó tu poema...letras que hablan de cierto cansancio ante la lucha del dia a dia y se lee convincente.....bien que ha escrito tu pluma
mi abrazo para ti

Anónimo dijo...

Sigue haciendo volar esos aviones de papel con tus poemas impresos, amigo mío y deja que lleguen lejos.
Un abrazo.

Anónimo dijo...

Compañero Óscar, ya me hablaste sobre este poema en la tertulia del jueves, lo leo con todo ese sentimiento que dejas plasmado, me gusta como lo has dejado plasmado, seguro que al final todo se quedará en su sitio, un abrazo para ti y otro para tu hijo.
Que vuelen alto esos aviones de papel cuando estáis juntos.